El Pentágono teme una gran guerra dentro de cinco años, pero carece de dinero para prepararse"
27 Agosto 2016
El Pentágono está preocupado por un probable conflicto a gran escala con Rusia, Irán o Corea del Norte
y "no está preparado para ninguno de estos escenarios", advierte un artículo de 'Forbes'.
El Pentágono teme que dentro de cinco años, EE.UU. pueda ser arrastrado a "una gran guerra", pero carece de recursos para prepararse, revela el analista Loren Thompson en un artículo para 'Forbes'.
Según el autor del artículo, los líderes del Pentágono saben que van a luchar contra terroristas e insurgentes "en un futuro previsible", si bien lo que realmente les preocupa es "el probable regreso de un conflicto convencional a gran escala" con Rusia en Europa del Este, con Irán en Oriente Medio, o con Corea del Norte en el noreste de Asia. "O tal vez en los tres lugares", añade.
EE.UU. "no está preparado para ninguno de los escenarios"
En este contexto, el analista sostiene que los planificadores militares estadounidenses están preocupados por el hecho de que el Ejército del país "no esté adecuadamente preparado para ninguno de estos escenarios, y ni mucho menos para una situación en la que más de uno de estos escenarios se desarrollan de forma simultánea".
Uno de los problemas, según Thompson, es la falta de inversión en nuevas tecnologías para el combate terrestre. En este sentido, estima que el presupuesto total del Ejército para el desarrollo y producción de nuevos equipos, desde tanques a misiles, pasando helicópteros y obuses "asciende apenas a dos días de gastos federales anuales".
El periodista agrega que el nivel de gasto es tan "increíblemente bajo" que el Ejército "gasta menos en la adquisición de vehículos de ruedas y de orugas en un año que lo que General Motors gana en ventas cada semana".
El presupuesto solicitado para los helicópteros (3.600 millones de dólares) "se centra principalmente en la mejora de helicópteros de la era Reagan, porque no puede permitirse el lujo de comprar otros nuevos", lamenta Thompson.
A su vez, agrega, el presupuesto para las municiones (1.500 millones de dólares) "no es mucho mayor de lo que los estadounidenses gastan en fuegos artificiales cada año (alrededor de 1.000 millones)".
Dejar de hacer los planes utópicos
"Así, pues, los líderes del Ejército no exageran cuando dicen que no tienen importantes planes de modernización previstos hasta la próxima década", asegura el analista.
En su opinión, el Pentágono tiene que dejar de lado "todo tipo de planes utópicos de 'recapitalizar' los viejos sistemas de combate", y centrarse en "remediar aquellas deficiencias que puedan ser corregidas rápidamente".
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